El río Soča talló la piedra caliza para formar este espectacular desfiladero de 750 metros de largo, uno de los tesoros imprescindibles del Parque Nacional de Triglav. Con unos pocos metros de ancho y 15 de profundidad, este mágico lugar es perfecto para el senderismo e incluso para nadar. Esto último, por supuesto, no es para los débiles de corazón, ya que la temperatura alcanza un máximo de 12 grados.
El desfiladero de Soča se puede explorar a pie. Caminar por el sendero temático del desfiladero y por sus puentes de madera es una experiencia saludable y educativa muy recomendable.
El desfiladero de Soča no es totalmente accesible y sólo se pueden admirar algunos tramos a lo largo del sendero forestal señalizado. La visita en invierno no es aconsejable en algunos tramos más expuestos del desfiladero debido a las zonas resbaladizas y heladas que pueden ser especialmente peligrosas. Sin embargo, el resto del año, el desfiladero de Soča debería figurar en un lugar destacado de su lista de destinos de senderismo.